El trabajo es sin lugar a dudas uno de los mayores privilegios que tiene el ser humano para ser útil para sí mismo y para una sociedad, pero cuando no se hace por las razones adecuadas y en equilibrio con otras áreas humanas altamente importantes para tener una calidad de vida adecuada puede convertirse en un enemigo peligroso y en una seria patología psicológica conocida como la adicción al trabajo o workaholism como se le conoce en el idioma inglés.
La adicción al trabajo es un apego desesperado por las actividades laborales y tiene como causas o esconde realmente una serie de factores psicopatológicos como: temor a la soledad, el inconformismo llevado al extremo, el escapismo de una vida insatisfecha en varios aspectos, complejos y en general este problema hace que el trabajador se refugie en un aparente y exagerado buen rendimiento laboral el cual sin duda no es tan bueno como aparenta muchas veces y que puede causar serias consecuencias a nivel físico, psíquico y emocional en la vida de cualquier persona laboralmente útil.
La adicción al trabajo lejos de ser una cualidad de éxito es una esclavitud que desgasta, agota y acaba con la vida mental, emocional y física de una persona a la vez que su rendimiento laboral deja de ser óptimo y se convierte en proclive a errores de atención y de relaciones convenientes con cualquier equipo de trabajo.
Según investigaciones recientes un empleado exitoso en cualquier cargo ejecutivo trabaja en promedio de 8 a 16 horas diarias, sin embargo la gran mayoría más de un 85% se esfuerzan por mantener un equilibrio entre su vida personal y laboral. Esto incluye aspectos como pasar tiempo con la familia, descansar, salir de viaje, hacer ejercicio, tener vida espiritual y compartir tiempo con amistades.
En cambio en el caso de los adictos al trabajo el número de horas puede aumentar significativamente de 16 a 18 horas diarias sacrificando todos los factores mencionados para tener una vida saludable.
En el adicto al trabajo existen una o varias ausencias de tipo afectivo y social, por lo cual el compartir tiempo en familia, hacer nuevos amigos o frecuentar a los conocidos se reduce al mínimo. Y existe en ellos un alto sentido del deber pero llevado al extremo, ya que si no se encuentran trabajando o participan de conversaciones que no incluyen temas de trabajo, el estado de ánimo se halla muy propenso a la depresión, la ira o la ansiedad.
En otros artículos hemos expuesto que el ser humano es una unidad de cuatro áreas fundamentales: espiritual, mental, emocional y física. Cada una de estas áreas tienen necesidades independientes que no se pueden descuidar y el resultado de crear este desequilibro puede afectar seriamente las otras partes y finalmente poner en riesgo la vida misma.
Muchas personas que son adictas al trabajo se refugian de forma inconsciente en él porque piensan que el reconocimiento que obtienen con su ardua labor ayuda a solucionar áreas de su vida que han descuidado o en las que han sido maltratados, y el dinero que con ello se genere poco o mucho también sirve para sentirse realmente valiosos en una sociedad cambiante y acelerada como la actual.
Al principio de este artículo decíamos que es válido trabajar intensamente por las razones adecuadas y ello se refiere a atender las responsabilidades laborales con dedicación, pero para obtener un resultado intelectual, emocional y económico con el fin de dedicar tiempo a otras áreas de la vida que son fundamentales en la vida personal como el campo: espiritual, familiar, social, el desarrollo mental, descanso y relajación, etc.
Según T Harv Eker autor del best seller “Los Secretos de la Mente Millonaria” el dinero es extraordinariamente importante en las áreas en las cuales funciona. Y extremadamente poco importante en las que no. Y esto también aplica al trabajo pues el dinero viene como consecuencia del trabajo. Con esto queremos decir que si bien el ser un buen trabajador es necesario para llevar una vida digna y ganar dinero suficiente también lo es, estos dos factores no pueden reemplazar o abarcar por sí solos las cuatro áreas vitales que forman al ser humano en este universo: espiritual, mental, emocional y física.
En el caso de la productividad económica por ejemplo un adicto al trabajo no necesariamente gana mucho dinero por su sobre dedicación en la actividad laboral, muy por el contrario muchos de ellos ganan sueldos realmente modestos y sus patrones se aprovechan de esa debilidad para sobre cargarlos de trabajo y pagarles con algunos elogios y reconocimientos pero con muy poco o ningún dinero adicional al sueldo que se fijaron entre las partes en la firma del contrato laboral.
Hay que tener en cuenta que si de productividad económica se trata, los grandes dueños de negocios e inversionistas tienen claro que al principio el trabajador debe laborar intensamente para lograr un capital inicial que luego deberá tomar el lugar del trabajador representado en inversiones y actividades laborales lucrativas que no requieran mucho la presencia del trabajador, de forma que cada vez más trabaje el dinero para el dueño del capital y con esto se libere cada vez más tiempo para ser utilizado en otras áreas de la vida.
La adicción al trabajo se observa con mayor frecuencia en empleados que en empresarios aunque estos últimos si no delegan responsabilidades y quieren estar al frente de todos los aspectos de su empresa o de su grupo de empresas, pronto serán atrapados por esta enfermedad psicológica, con las mismas consecuencias para su vida que debe enfrentar un trabajador asalariado.
Para reducir la esclavitud laboral o la adicción al trabajo existen varias estrategias, una de ellas es enfocarse en optimizar el tiempo y en esforzarse por realizar prioritariamente en el trabajo aquellas actividades que más beneficio económico aportan tanto para la empresa como para el bolsillo del trabajador y delegar o reducir aquellas otras que aunque necesarias no aportan logros económicos significativos.
Miremos tres casos que ilustran bien este concepto:
Empleados Administrativos
Aunque si bien la gran mayoría del trabajo que hace este tipo de trabajador no es delegable sobre todo cuando el cargo no tiene empleados a su mando, puede enfocarse en ejecutar todos los días las tareas que agilicen procesos nuevos o antiguos y postergar para tiempos libres aquellas actividades que no cumplan este propósito.
Empleados Comerciales
En este caso lo que cuenta es hacer todas las actividades diarias que conduzcan a una venta. Como buscar nuevos clientes, esto incluye hacer nuevas llamadas telefónicas para captar empresas o personas interesadas, planear visitas a nuevos clientes, enviar correos de presentación,etc., y llamar a los antiguos para ofrecerles nuevos productos o evaluar su nivel de satisfacción.
Empresarios y Emprendedores
En este nivel el mayor acierto consiste en optimizar el tiempo y evitar abarcar todas las áreas de la empresa, delegando funciones en el personal administrativo y recompensando o brindando oportunidades de ascenso a quienes lo hagan con esmero. Aprender a confiar en las personas es vital para delegar responsabilidades. Si el empresario debe estar en todo y piensa que sin él o ella la compañía fracasa, será presa de la adicción al trabajo y su empresa no sobrevivirá.
A continuación algunas otras recomendaciones útiles para evitar la adicción al trabajo:
- El trabajo es una actividad fundamental para ser y sentirse útil para la sociedad. Pero no puede convertirse en el centro de la vida a tal punto que conduzca a descuidar o a abandonar otras áreas humanas necesarias para el crecimiento y la estabilidad.
- Como ser humano recuerda que tienes áreas que demandan atención permanente: espiritual, mental, emocional y física y debes establecer tiempos y metas para desarrollarlas y alimentarlas, igual a como lo haces para tu trabajo como empleado, emprendedor o empresario.
- Ten presente que el dinero en abundancia no depende de cuan duro trabajes y te esfuerces Ese en un concepto anticuado de la Era Industrial. Pero ahora en la Era de la Información existen vehículos económicos más rápidos, menos desgastantes y efectivos como los negocios de última generación que cambian todo el panorama.
- Si eres empleado(a) trabaja con mayor empeño en ayudar a tu empresa a solucionar problemas o situaciones y para esto enfócate en las tareas de tu cargo que desatranquen o ayuden a agilizar los procesos de la compañía. Y si tienes empleados a tu cargo aprende a delegar funciones.
- Si eres emprendedor(a) o empresario(a) debes enfocarte en optimizar el tiempo y para ello debes constituir un equipo de trabajo adecuado delegando funciones, tomando decisiones en conjunto y permitiendo que las personas hagan su cuota de aporte para el crecimiento de la empresa. Si la compañía te absorbe por completo y debes estar en todo lo que sucede para que las cosas funcionen estarás sometido(a) a los rigores y consecuencias de la adicción al trabajo.
- La vida espiritual, la vida familiar, la vida social, el ejercicio, la alimentación saludable, el descanso y la relajación son fundamentales para ser un trabajador exitoso en cualquier campo laboral que escojas. Si reemplazas esto con la adicción al trabajo pagarás un precio muy alto que puede ser en algún momento pagar con tu propia vida.
- Cuando la adicción al trabajo es extrema lo mejor es buscar ayuda profesional pues se ha desarrollado una enfermedad mental conocida como Trastorno Obsesivo Compulsivo que requiere de varias sesiones de tratamiento y acompañamiento.
- Para evitar la Adicción al Trabajo reprograma tu mente con los recursos de Crecimiento Personal que ofrecemos en Crear Futuro Global y comienza a producir más en todas las áreas de tu vida con menos.
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