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Coronavirus Pandemia Mundial Prevención y Control

El coronavirus o SARS-CoV-2 como se le conoce a nivel científico y covid-19 la enfermedad que produce, es el virus de mayor alcance conocido que se transmite con facilidad, hoy más de 500´000.000 de contagiados y que ha cobrado la vida de más de 15´000.000 personas en más de 198 países.

Este virus amenaza seriamente a las poblaciones del mundo, que distraídas e inconscientes muchas veces, sin información adecuada, con una cobertura deficiente de los sistemas de salud y con malos hábitos de higiene básica personal enfrentan a un poderoso enemigo microscópico el coronavirus (covid-19) que puede terminar con sus vidas antes de los esperado.

Para entender mejor a este agente infeccioso, un virus es ante todo un pedazo de material genético errante que permanece en las superficies o que viaja a través del aire buscando un lugar ideal donde pueda infectar y reproducir al inyectar su material genético ARN invadiendo células de un cuerpo animal o humano y así dar origen a miles o cientos del miles de nuevos virus que destruirán a cualquier célula huésped sino se contrarresta su presencia y avance en el cuerpo de la víctima a la cual invadió.

Hoy como nunca la humanidad se enfrenta a retos muy grandes para asegurar la supervivencia en el planeta, tanto en los problemas externos a los seres humanos como el calentamiento global como en los internos, a nivel de salud y convivencia pacífica en cada entorno, en un mundo muchas veces obsesionado con una vida desenfrenada y carente de valores personales y principios morales y éticos, que aseguren la continuidad de la especie.

BREVE HISTORIA DEL CORONAVIRUS

El coronavirus (covid-19) se originó en la ciudad china de Wuhan y se debió a la mala manipulación de las especies salvajes en el mercado de Huanan que vendía carne en esta ciudad de 11 millones de habitantes con pésimas condiciones de control sanitario y donde se ofrecían para la venta y al aire libre, carne de diferentes especies de animales como los ratones, koalas, murciélagos, cachorros de lobo, cocodrilos, etc.

El coronavirus (covid-19)  fue detectado por primera vez en Diciembre de 2019 en Wuhan China y se transmite a través de gotas de saliva por estornudos o tos de una persona contagiada, igualmente en superficies donde el virus haya sido lanzado y permanezca activo, ya que puede estar activo en una superficie por horas o días dependiendo de varios factores como la temperatura, humedad o tipo de superficie. Este virus puede producir enfermedad respiratoria aguda y neumonía grave, lo cual ha sido causa de muchas muertes, más de 15´000.000 en el mundo según la OMS (organización mundial de la salud).

Todo apunta, según los expertos en epidemiología a que este virus se alojó inicialmente en los murciélagos que como especie animal salvaje tiene las condiciones ideales para incubar y propagarlo ya sea a través de la saliva o por contacto directo con una de sus partes corporales. Y aunque el virus como tal no se adaptó inmediatamente al organismo humano para infestarlo y atacarlo, esto debido a nuestro sistema inmunológico finalmente lo hizo (una propiedad inherente a todos los virus) y se alojó en los seres humanos produciendo con el tiempo la pandemia que hoy azota al mundo.

La propagación del virus una vez adaptado a los organismos humanos fue un proceso de tiempo hasta que se alcanzó un número crítico de contagios que a su vez lo transmitieron a otros ciudadanos chinos a través de la tos, los estornudos y los objetos contaminados. Lo que a su vez produjo nuevos contagios y estos se multiplicaron infectando personas que viajaban dentro y fuera del país o a extranjeros en China que se contagiaron y regresaron a sus países de origen para repetir el ciclo de nuevos contagios y producir la pandemia mundial actual. 

SÍNTOMAS DEL CORONAVIRUS

En los primeros 5 a 15 días el coronavirus (covid-19) es asintomático y no muestra síntomas, luego al cabo de ese tiempo la persona comienza a presentar síntomas como de una gripa fuerte con tos seca, cansancio, fiebre, dolor de garganta, flujo nasal, diarrea y dificultad para respirar cuando la enfermedad se encuentra en estados avanzados.

Sin embargo, el coronavirus (covid-19) también es capaz de afectar otros órganos como: el corazón, los pulmones, los riñones, el sistema circulatorio y el sistema inmunológico o inmunitario.

Una de las razones por la cuales el coronavirus avanzó tanto en el mundo es que no estaba bien identificado como nueva especie de virus potencialmente dañina y mortal, y se asoció con la gripe por la similitud de los síntomas que presentaba. Sin embargo, cuando el virus avanza complica seriamente las vías respiratorias produciendo neumonía y posteriormente la muerte.

El coronavirus debe su peligrosidad a que es altamente contagioso, aunque hasta ahora solo produce la muerte en un porcentaje menor al 4% de los pacientes infectados incluyendo todas las edades registradas de cero a mayores de noventa años.

EDADES Y PERSONAS EN ALTO NIVEL DE RIESGO

Los niños, adultos mayores y personas con enfermedades crónicas o terminales como diabetes, hipertensión, cáncer, sida; adicciones como alcoholismo, tabaquismo, alucinógenos, farmacodependencia y bajo nivel de defensas o deficiencias en su sistema inmunológico se encuentran en alto riesgo frente al ataque del coronavirus y pueden presentar síntomas acelerados o fatales ante un posible contagio.

Ante todo si se es vulnerable al ataque del coronavirus por edad o condición clínica se debe consultar al médico y no automedicarse, sin saber los efectos que los medicamentos puedan ocasionar.

PREVENCIÓN Y TRATAMIENTO

Dado que ya existen vacunas contra el coronavirus, no obstante, la mejor forma de prevenir la enfermedad sigue siendo evitar la exposición al virus y por ello los protocolos internacionales recomiendan lo siguiente:

RESPONSABILIDAD PERSONAL Y COLECTIVA

Es importante en estos momentos y para cualquier persona en el mundo acatar las instrucciones y restricciones que cada gobierno impone para combatir la pandemia del coronavirus (covid-19), y no desafiar el virus haciendo caso omiso de todas las recomendaciones hechas, ya que las consecuencias no se harán esperar y se pagará un precio muy alto por la salud personal, familiar y social.

En muchos países el virus se encuentra en expansión y es ahí donde ocurre el mayor índice de contagios, luego vendrá una etapa de estabilización de la enfermedad y los casos aumentarán a un ritmo más lento, pero aunque esto esto suceda se deben seguir los protocolos de seguridad que fijan las autoridades sanitarias y de gobierno en cada país.

¿QUÉ HACER SI SE VIVE CON O CERCA DE UN CONTAGIADO DE CORONAVIRUS?

Básicamente se debe buscar asistencia médica de los organismos de gubernamentales que en muchos países son ellos mismos quienes aíslan y establecen las cuarentenas para cada paciente y los mantienen en constante observación.

Si se vive cerca pero no en la misma casa con un contagiado de coronavirus, se debe utilizar tapabocas y no acercarse a él hasta tanto no haya superado con éxito los síntomas de la enfermedad.

Si se vive dentro de la misma casa de un contagiado por coronavirus, se debe usar tapabocas permanente, mantener ventiladas las zonas del hogar como alcobas, salas, cocinas y patios. Utilizar guantes en caso de tocar al enfermo y no dormir con él en la misma habitación.

Limpiar y desinfectar todas las superficies del hogar y especialmente las áreas donde el enfermo permanece en cuarentena y observación.

Esto no impide tener con el enfermo una actitud solidaria, caritativa y de apoyo moral mientras supera la enfermedad.

CONTROL DE LOS EFECTOS DEL CORONAVIRUS

Otro de los recursos más importantes para enfrentar el impacto del coronavirus (covid-19) está en fortalecer el sistema inmunológico a través de una nutrición adecuada y de la ingesta de suplementos alimenticios que proporcionen al organismo humano todas aquellas faltantes en nutrientes que debido a una mala alimentación se requieren y que sin ellos el sistema inmunológico no podrá hacer frente a este virus mortal sin salir muy mal librado, quien lo padece.

La mejor estrategia para contrarrestar cualquier tipo de infección que se presente en el cuerpo humano está en fortalecer el sistema inmunológico para no depender de vacunas o medicamentos, que si bien pueden estar disponibles en algún momento como en el caso del coronavirus muchas personas pueden llegar tarde para recibirlas y encontrar así una muerte prematura.

En el caso del coronavirus existen suficientes casos de pacientes que superaron la enfermedad dado su buen nivel de defensas en su sistema inmunológico.

La falta de zinc por ejemplo entre otros nutrientes esenciales afecta particularmente al sistema inmunológico, ya que las células sanguíneas encargadas de la defensa frente a infecciones, se multiplican con una gran velocidad en presencia de virus, bacterias o cáncer. Si no hay la cantidad de zinc necesaria, esta proliferación se verá reducida y la respuesta inmune disminuirá.

El selenio también es un mineral muy necesario e importante que mejora el sistema inmunológico, según un estudio hecho por la FSA Agencia de Seguridad Alimentaria Británica asegura que este colabora para el funcionamiento óptimo del sistema inmune y evita el daño oxidativo en las células del cuerpo.

El cobre tiene propiedades antimicrobianas, se acumula allí donde se localiza la inflamación y puede desempeñar un papel en la respuesta inmune innata a las infecciones patógenas. Este mineral juega un papel importante en el desarrollo y el mantenimiento de la función del sistema inmune.

La vitamina C mejora la producción y el funcionamiento de los fagocitos, que son glóbulos blancos encargados de ingerir y absorber agentes infecciosos como bacterias, virus y hongos, y liberar enzimas para acabar con ellos. La vitamina C también es un antioxidante altamente efectivo que protege las células del cuerpo contra especies reactivas de oxígeno.

Las vitaminas del complejo B como tiamina o vitamina B1, ácido pantoténico o vitamina B5, biotina o bitamina B8 y la vitamina B12 aumentan la cantidad de anticuerpos para luchar contra los virus, bacterias y hongos.

El Omniplus viene con 30 sobres para tomar uno diario diluído en agua, ya que ha sido desarrollado con la técnica patentada de micelización  que al combinarse con el agua y entrar al cuerpo humano puede absorberse en más de un 98% en los tejidos y la sangre cumpliendo así con restaurar y elevar el sistema inmunológico a su máximo nivel para enfrentar cualquier tipo de enfermedad o virus invasor con éxito. 

A modo de ilustración se sabe que un sistema inmunológico fortalecido puede producir hasta dos billones de células en menos de 24 horas para enfrentar cualquier tipo de infección que llegue a nuestro cuerpo.

Esto no quiere decir sin embargo que el paciente no contraerá el virus pero si contará con las reservas suficientes para superar la enfermedad en muy poco tiempo y sin la ayuda de medicamentos que pueden dañar o alterar el organismo.

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Recomendaciones finales para viajeros:

¿CÓMO RESPONDER ENTONCES AL ESTRÉS QUE GENERA UNA PANDEMIA COMO EL CORONAVIRUS?

Aunque responder esta pregunta no es fácil porque implica un cambio forzoso de mentalidad y costumbres, es también una oportunidad para cultivar y proteger los valores fundamentales como: Dios, familia, país, trabajo, salud y comunidad. Esto permite tener una vida espiritual más activa, orando, meditando y agradeciendo a Dios por todos los beneficios que hemos recibido de él por años y pidiendo su ayuda y protección, hacer vida familiar y fortalecer los lazos entre los miembros del hogar, con la pareja, con los hijos, leyendo, viendo y escuchando no solo noticias, sino también información positiva que nos mantenga motivados y con esperanza, estudiando, escuchando música, haciendo labores de hogar, ayudando a otros en la medida de lo posible, entre otras ocupaciones útiles.

Por otra parte mantener una actitud mental positiva y calmada ante este tipo de crisis o desafíos es fundamental. Las crisis siempre traen experiencias que nos fortalecen en la vida, y dado que la vida es cambio no es posible sustraerse a ellas pero si aprender de las valiosas experiencias que nos dejan. Y cultivar la fe en que todo cambiará para bien en estos momentos de duda e incertidumbre es muy necesario, con la ayuda divina y espiritual, pues como seres humanos somos frágiles y limitados, y el universo en sus cambios siempre excede nuestras capacidades para controlar aquello que sucede externamente aunque no nuestra respuesta interior. No olvidemos esta frase «la fe en el futuro trae fuerza en el presente»

CRISIS Y CAMBIO DE VIDA

En toda crisis personal, local, nacional o mundial es necesario evaluar y revaluar los pensamientos y acciones que como seres humanos generamos y hacemos. Hoy la magnitud de la crisis del coronavirus es global y de largo alcance, y cada quien debe examinar su vida y sus acciones, y como estas influyen en el entorno para bien o para mal. Nuestro mundo vive en gran medida una distorsión de los valores fundamentales confundiendo esto con un libre derecho y desarrollo de la personalidad.

La falta de Dios como principio rector de la vida, la legalización y práctica de los abortos, la ideología de género, la destrucción de las familias e hijos sin educación moral por parte de padres irresponsables, el matrimonio y la adopción gay, el abuso de menores, el abuso y destrucción de los recursos naturales y de las especies animales, el narcotráfico, la codicia excesiva de muchos para ganar dinero a cualquier precio, los vicios que esclavizan a muchos, los asesinatos, robos, secuestros y corrupción a todo nivel en los diferentes sectores económicos del mundo, la avaricia e indiferencia ante el dolor ajeno son algunos de los antivalores y problemas graves que enferman y destruyen hoy a nuestra sociedad a nivel global.

No podemos entonces pretender que los falsos valores y las malas acciones de muchos seres humanos que no solo ahora sino a través de la historia del hombre y las civilizaciones han destruido el planeta, el tejido social, familiar y personal no tengan un pago justo por las malas obras, llámese guerras, pandemias, muerte y destrucción. Es necesario entonces para todos reflexionar seriamente y cambiar, y si vamos a pedir a Dios quienes creemos en él ayuda y misericordia en estos momentos, debemos primero revaluar nuestro modo de vida y practicar, y promover en una sociedad necesitada y enferma los verdaderos valores y principios morales

En resumen, el coronavirus (covid-19) es una oportunidad para aumentar nuestro nivel de conocimiento, prevención y responsabilidad personal y colectiva frente al surgimiento y ataque de nuevas enfermedades, y para defender y cultivar un estilo de vida sano que facilite la conservación de la salud física, espiritual, mental y emocional, bienes inapreciables para lograr una vida de calidad en todos los seres humanos.     

 

 

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